Es Laura Cartuccia, actual diputada provincial del macrismo, aliada al oficialismo, que el año pasado frenó el proyecto de Ley de la Memoria. En 2016 ya había protagonizado una polémica por cobrar cuatro sueldos del Estado al mismo tiempo.
Hace tiempo que Laura Cartuccia quiere convertirse en intendenta de Salta. El tiempo, las campañas y los votos dirán si alguna vez lo logrará. Mientras tanto, su figura todavía no parece reunir las condiciones para cautivar al electorado. Especialmente, tras protagonizar más de una polémica política en los últimos años.
Sin embargo, la actual diputada provincial que forma parte del macrismo pero está dentro del frente oficialista, aseguró en las últimas horas que todavía mantiene sus intenciones electorales.
«Me gustaría ser candidata a intendente, lo expresé varias veces», dijo Cartuccia, que sabe que la postulación no depende de sus ganas. «Formo parte de un proyecto donde el líder es Gustavo Sáenz, tampoco soy tan necia como para encapricharme con una candidatura si no están dadas las condiciones», dijo.
En FM Aries, la actual titular de la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, dijo que también le interesa ser reelecta en su banca.
«Como legisladora todavía me falta muchísimo trabajo por hacer. Es un lugar que me gusta mucho a pesar que siempre he estado ocupando lugares en el Ejecutivo», dijo.
Y vaya si ha ocupado lugares. Tantos, que en 2016 Cartuccia protagonizó una polémica tras ser denunciada por ejercer de manera simultánea los cargos de Directora General de los Centros de Integración Comunitaria, Auditora del IPS, Encargada del Programa Nacional de Municipios y Programas Saludables, además de ejercer su profesión de oftalmóloga en el Hospital San Bernardo.
Tras el escándalo, Cartuccia se quedó con el cargo municipal, donde algunos empleados la denunciaron por malos tratos. En la primera semana de abril de 2018, se hizo cargo del ANSES Salta. Luego fue electa diputada provincial.
En la Legislatura, Cartuccia no estuvo ajena a los problemas. En los últimos meses de 2022, en su rol de titular de la Comisión de Derechos Humanos, frenó el proyecto de Ley Provincial de la Memoria y recibió a negacionistas, con quienes coincidió en más de una postura.
Pero eso no fue todo: en noviembre pasado fue repudiada por sus propios compañeros de la Legislatura tras burlarse del aspecto físico de otra diputada.