Según reveló el historiador Rodolfo Laufer, el Frente Revolucionario Peronista (FRP) tuvo mayor preponderancia que la agrupación Montoneros en el convulsionado escenario político y obrero de la provincia norteña durante la década del 70 del siglo pasado.
El doctor en Historia por la UBA, Rodolfo Laufer, presentó recientemente su libro «La CGT clasista de Salta. Radicalización obrera y peronismo revolucionario en la Salta de los años 70», en el que abordó la particular experiencia sindical clasista que surgió en esa provincia durante la llamada «primavera camporista» de 1973.
Pese a no ser salteño, Laufer explicó que su llegada al tema fue «relativamente casual» al ser sugerido por su director de tesis, Nicolás Iñigo Carrera, indagar sobre este proceso poco estudiado que siempre se mencionaba en la bibliografía sobre el movimiento obrero argentino de los 70, pero sin profundizar demasiado.
El historiador aseguró no haber tenido grandes problemas de fuentes para investigar, ya que revisó diarios de la época donde el breve pero convulsionado proceso de la CGT clasista en junio y julio de 1973 aparecía reflejado con notas de tapa e incluso pudo entrevistar a viejos militantes como Armando Jaimes del FRP.
Laufer estableció que, si bien el clasismo tuvo su epicentro en Córdoba, casos como el salteño demostraron que se constituyó como una corriente sindical de alcance nacional, planteando la lucha de clases, el objetivo antiimperialista y socialista, un sindicalismo democrático y combativo.
«El protagonismo dentro de las fuerzas que lo impulsaron del peronismo revolucionario, le dio una impronta particular», señaló Laufer y agregó que «en Salta estuvo claramente dirigido por el Frente Revolucionario Peronista, incluso con más peso que Montoneros».
«El FRP es parte del ala más a la izquierda del peronismo, el peronismo alternativista que sostenía que había que construir un peronismo obrero, de clase, sin burócratas y socialista», explicó el autor, quien destacó que adoptaban una estructura «de tipo leninista partidariamente» e incluso tenían un «brazo armado» como el Ejército de Liberación Nacional que fue el que más acciones llevó a cabo en la provincia, a pesar de que muchas de ellas no fueron atribuidas a este sector, sino a Montoneros.
«Planteaban que el peronismo tenía que depurarse, mantener la identidad pero incorporando conceptualizaciones marxistas y transformarse en un movimiento revolucionario con un objetivo socialista», afirmó Laufer sobre el accionar del FRP en la CGT clasista salteña.