Adelantó que si el gobierno nacional – a pedido del FMI y en nombre de la gobernabilidad – pide ajustar a trabajadores y jubilaciones; él votará en contra como lo hizo con la reforma previsional.
Aunque mostró satisfacción por el fin de la corrida del dólar, el diputado nacional advirtió que “quedan interrogantes por adelante” y mencionó entre ellos la necesidad de calibrar bien qué supondrá para el país “el acuerdo con el FMI, cuál será el rumbo del sistema financiero y si se ratificará o no el rumbo económico”.
Lo manifestó en el programa “Hablemos de Política” que se emite por FM Aries donde hizo hincapié en la agenda parlamentaria que se viene a partir de las aperturas de negociaciones con el organismo internacional que condiciona el préstamo a la realización de ajustes: “El problema no es el salario de los trabajadores o el ingreso de los jubilados. Los trabajadores no son una especie de termitas que se comen la riqueza nacional. Yo no voy a aprobar ese tipo de propuestas”, sentenció.
En ese marco fue consultado si esa decisión le traería problemas con el bloque del Peronismo Federal que respondiendo a los gobernadores podría apoyar medidas en ese sentido, David sugirió que allí “se trata de respetar los posicionamientos de cada uno y a mí hasta ahora me lo respetaron”. Es más, cuando uno de los periodistas le consultó si alguna vez pensó qué haría si se viera obligado a dejar ese bloque aseguró que “lo seguro es que no me veo en el kirchnerismo porque profundizando la grieta son funcionales a los planes del gobierno. No tendría problemas de armar un bloque con otros diputados nacionales por Salta con lo que podamos acordar puntos que redituarían a la provincia”, enfatizó el legislador planteando que alguna vez lo habló a esto con Sergio Leavy.
