Un empleado de una empresa estudiantil cobró a 28 chicos de Cafayate por un paquete a Bariloche que nunca pagó a la empresa. Los padres denunciaron al hombre, que admitió haberse quedado con el dinero.
Un grupo de 28 chicos de Cafayate se quedó sin poder realizar su viaje de egresados a Bariloche por una estafa de un empleado de una empresa estudiantil, que se quedó con el dinero de varias cuotas que pagaban los padres. A pocos días de confirmar los pasajes, la empresa decidió dar de baja el viaje porque nunca recibió ningún pago y dijo que no reconoce al coordinador como parte de su equipo de trabajo.
La denuncia fue radicada contra el hombre, que ya fue identificado, quien se presentaba como representante y cobrador de la empresa Lecfer. Los padres abonaron entre 180000 y 300000 pesos de acuerdo a las actualizaciones del paquete que les vendieron. Una de las madres contó que cuando realizaron los últimos pagos les entregaron una mochila con el logo de la empresa y les dijeron “Nos vemos el 11 de septiembre”, fecha estipulada del esperado viaje.
Días después recibieron una notificación, nuevamente por parte de la empresa, que les confirmaban la baja del viaje a Bariloche por “no haber cancelado toda la suma requerida”. Los padres enojados fueron a buscar al empleado coordinador y ante el constante pedido de respuestas dijo: “Algunos pagos me los hice quedar”, admitiendo que se había quedado con la plata de los chicos.
Esta familia espera por respuestas que nadie les dio, ni a ellos ni a los verdaderos damnificados, un grupo que soñaba con poder disfrutar de la nieve, las montañas y el entorno de Bariloche ayudados por el sacrificio de sus padres, que juntaron peso por peso para dar continuidad a la ilusión de sus hijos. Ilusión que quedó en el bolsillo de un estafador que arruinó lo que debía ser una fiesta de alegría.