Ayer hubo una protesta en la necrópolis salteña. Equiparación en la escala salarial y sumar un ítem por riesgo de enfermedades, entre los reclamos principales.
Ayer martes 25 de junio representantes sindicales del Sindicato Municipal de Salta (SIMUSA) y la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) coordinaron el reclamo a las afueras del Cementerio de la Santa Cruz. Ahí conversaron con la prensa.
“Nuestro reclamo tiene años, se trata de una emergencia funeraria y de falta de inversión”, comentó a Nuevo Diario, Alfredo Billafán, delegado de SIMUSA. Y analizó con números la realidad de los trabajadores: “Tenemos una recaudación de 24 millones de pesos por año y sin embargo, no tenemos materiales básicos como carretillas para nuestro trabajo”.
Respecto a los reclamos puntuales, el gremialista aseguró que el ítem por riesgo laboral y posibilidad de contagio de enfermedades, dadas las características del trabajo en un cementerio, ya lo tenían, pero “por arte de magia y negociaciones de otros sectores” se los sacaron. “Este ítem equivale al 50% del básico, y a nosotros nos terminan pagando 12 horas extraordinarias por un valor de 600 pesos, o sea que la hora equivale a 52 pesos”, comentó Billafán.
Entonces y ante la falta de propensión al diálogo por parte de las autoridades municipales, es que mantienen el estado de asamblea permanente. Hoy a primera hora de la mañana se reunirían en las oficinas de ATE para desde ahí marchar hacia el Centro Cívico Municipal y hacer ahí el reclamo pertinente.
