Daniel Escotorín catalogó a la movilización convocada por la CGT como un mensaje claro hacia el gobierno de Mieli y auguró que la posibilidad de unión con movimientos sociales será marcado por el «ritmo político de la crisis».
En charla con el programa Cuero Oscuro (FM La Plaza 94.9), el referente de Unidad Popular, Daniel Escotorín, consideró que el paro general de 24 horas convocado por la CGT fue «muy contundente» en la mayoría de las ciudades del país, al tiempo que resaltó la importancia de la articulación alcanzada con los movimientos sociales para expresar el malestar de la clase trabajadora. Según su mirada, la medida de fuerza constituyó un «llamado de atención muy contundente» del conjunto de trabajadores ocupados, desocupados, precarizados e informales hacia el Gobierno nacional.
Al situar su análisis en Salta, Escotorín se refirió a las declaraciones del dirigente bancario Carlos Rodas, quien había planteado que la CGT local abría un proceso de unidad con las organizaciones sociales. Al respecto, expresó: «La CGT a nivel nacional siempre puso muchos reparos a la integración de los movimientos sociales, si bien después la UTEP al conformarse como a una unión de trabajadores tuvo cierto respaldo de algunos sectores de la CGT y pudieron integrarse, o por lo menos tener cierto nivele de coordinación, pero no sé cómo se dará, si es viable ese proceso aquí en Salta. Creo que en todo caso eso también va a estar marcado por el ritmo político de la crisis».
No obstante, destacó que en la movilización local confluyeron la CGT, los movimientos sociales, la CTA Autónoma y los gremios estatales, lo que «abre una discusión sobre los modos en que va a seguir este plan de lucha». En ese marco, remarcó que desde su espacio político vienen planteando «la necesidad de avanzar contra el DNU 70/2023, que es la herramienta legal que tiene el Gobierno para gobernar».
Consultado sobre el voto a Javier Milei en sectores que habitualmente respaldaban a los gremios, Escotorín sostuvo que el actual presidente «ganó porque lo votaron todos los sectores, de forma transversal». Sin embargo aclaró que con el correr de los meses, cada vez son más lo que se ven afectados por las políticas de quienes recibieron su voto, y eso se refleja en la participación activa en movilizaciones multitudinarias, como la marcha universitaria de semanas atrás, donde se vio a muchos votantes de Milei protestando contra su gobierno.
«Es un proceso lento y gradual, que a medida que cada sector se vea más afectado por estas políticas, podremos incorporar la discusión no en términos partidarios electorales, sino de un proyecto alternativo, distinto al del Gobierno pero también al del Frente de Todos», analizó Escotorín. Y concluyó: «Hoy estamos abocados a juntar los pedazos que están siendo atacados para, hacia adelante, poder discutir una construcción política diferente; no política en términos partidarios electorales, sino discusión política en el sentido del componente de un proyecto, de propuestas, que nos permitan a nosotros volver a poner en en la sociedad un modelo que sea alternativo, que sea distinto, no solamente a este gobierno. Porque efectivamente también tiene que ser algo distinto a lo que hizo el gobierno del Frente de Todos. No podemos mirar para otro lado y decir, ah, este gobierno está haciendo todo mal y no hacernos cargo de lo que hizo el gobierno del Frente de Todos. De hecho, ahora Javier Milei está está gobernando porque el desastre comenzó con Alberto Fernández».
