El director de la Consultora WE balanceó políticamente el mes de septiembre. Resaltó que el gabinete carece de planes y tampoco cumple la función de parar las balas que recibe el gobernador provincial.
El balance del consultor llegó a través de un hilo de tuit. Allí se propuso balancear el mes que se fue y tratar de responder una pregunta: ¿Cuándo se detiene la caída de la popularidad del gobierno? Seguramente hacía referencia a las encuestas de la consultora cordobesa CB que mes a mes – desde mayo – difunde el ranking de popularidad de los gobernadores. En el caso de Salta, la imagen del mandatario salteño fue cayendo desde entonces.
Para Gebhard, en las causas de la caída de popularidad se encontrarán respuestas en torno a cuándo se detendrá la pérdida de popularidad. “El gobierno se obnubiló con el escenario del COVID-19 y los altos valores de aprobación. Se paró sobre el discurso sanitario cuando la situación era óptima y descuidó las demandas alternativas perdiendo el compás. Compás que falló cuando la situación sanitaria efectivamente entró en tensión y el relato no se condijo con la realidad. Entró entonces en el peor escenario: restricciones sin consenso”, escribió.
En ese punto, el director de la Consultora WE resaltó que para el gobierno de Salta se pinchó la burbuja de la inmunidad. “Recibió ataques permanentes de todo el arco político, frente a los cuáles no tuvo otra respuesta que la victimización o el intento de subir a Leavy al ring. Ring en el que estaban esperando otros sectores de la sociedad (médicos, comerciantes, artistas y medios) frente a los que reaccionó sorprendido, indignado, y sin respuestas”.
Gebhard se refirió duramente sobre el gabinete provincial. “Sin respuestas, podría ser el apellido del gabinete. Quedó en el baúl de los recuerdos el ‘plan del día después’ (28/5), junto a la funcionalidad de parar las balas. Sin vínculo con sus ámbitos, ni con la prensa, solo atinaron a cerrar sesión cuando se puso espeso” (…) Pulleiro x 4 (desaparición hojas de coca, reclamo policial, vecinal y fake news), las denuncias entre Medrano y Esteban, De la Arena y la venta de plasma o Martín Plaza y Betina Saracino amenazando periodistas. Así mejor déjenlo solo”, resaltó en referencia al casi nulo acompañamiento que posee el gobernador de sus colaboradores.
El hilo de tuit culminó con un somero punteo de la relación entre Gustavo Sáenz y los aliados políticos con los que llegó al gobierno. “Solo no está, pero sí con menos socios. La relación con el gobierno nacional tiene sus costos. El desembarco en el PJ y el conflicto por la coparticipación de CABA tuvo consecuencias: Primero críticas (JCR Nanni y Grande) y después portazo de Cornejo y Gauffin”.