Estuvieron en el CCM este jueves.
La venta de pirotecnia en la ciudad se encuentra en un limbo en el que hay una ordenanza que la prohibe pero que todavía no fue reglamentada. Los comerciantes, con las fiestas encima, exigen una habilitación temporal para vender durante el fin de año.
El Tribuno informó que los vendedores esperan que Bettina Romero los beneficie. Se reunieron con el secretario de Protección Ciudadana, Nicolás Kripper y le aseguraron que la ordenanza tiene fallas e imprecisiones.
El problema que se generó por la falta de reglamentación es que aún no se estableció, con claridad, cuánto va a ser el nivel de ruido que podrá tener la pirotecnia que se podrá vender, ya que ninguna es no sonora.
El matutino agregó que los comerciantes piden trabajar, algo que se les ve impedido y que afectaría a más de 200 locales y a más de mil personas del rubro.