El diputado dijo que el control debe ser independiente.
En la sesión de Diputados de este miércoles, Carlos Zapata apuntó a un aspecto del proyecto de reforma de la Constitución provincial que no había sido señalado hasta ahora, sobre los integrantes de la Auditoría General de la Provincia.
El proyecto busca reformar el artículo 169, que indica cuántos integrantes tendrá la Auditoría General de la Provincia. La iniciativa de Gustavo Sáenz promueve su integración con tres miembros de la oposición y dos del oficialismo. Zapata se mostró en contra de esto.
«La palabra auditoría se define como la labor realizada por un profesional independiente. La palabra independiente no está sólo en la definición sino que está en las normas aprobadas y vigentes. ¿Qué significa independiente? Prescindencia de vínculo. Si quien propone esta reforma dice que el Colegio de Auditores se va a integrar con la mayoría de la oposición, no cambia nada. La política no puede designar a quien controla la política», dijo Zapata en su intervención en la Legislatura. Comparó la situación con un «perro atado con chorizos».
«Sigamos el ejemplo de Brasil, donde la auditoría está separada de la política. Es una carrera que se llega por meritocracia y ustedes han visto en un pasado no muy lejano cuáles son los beneficios de la auditoría separada de la política», siguió Zapata.
El diputado pidió «que los auditores no tengan ninguna vinculación con la política» y que «la proposición para el acuerdo surja de un proceso independiente a la política».
«Que la idoneidad sea juzgada por la universidad, el consejo profesional, y si hay más de un postulante que llegue por sorteo. Es la única forma de que sea realmente independiente», finalizó.