El diputado nacional reconoce la debilidad del gobierno en la etapa actual y asegura que la intransigencia extrema puede profundizar la crisis. También adelantó que no aprobarán ningún presupuesto que no tenga el visto bueno de Urtubey.
“Debemos administrar bien nuestras disidencias con el gobierno nacional. A veces seremos duros y a veces cederemos. Si nos pasamos en una situación de intransigencia se podría profundizar la crisis y creemos haber aprendido algo del 2001”, enfatizó el legislador nacional y presidente del Interbloque Argentina Federal que ayer habló con el programa “Hablemos de Política” que se emite todas las tardes por FM Aries.
El diputado nacional por Salta dio su parecer respecto a la grave situación económica pero también política por la que atraviesa el país: “La Argentina vive momentos difíciles donde cualquier debate se torna complicado con un gobierno que no le encontró el rumbo económico al país y estamos viviendo una crisis que nadie imaginaba que sería de tal envergadura. Un gobierno que se deja ayudar muy poco y es muy obstinado”, indicó.
En ese marco, Kosiner no tuvo reparos en señalar que mucha de la gobernabilidad que posee el gobierno de Macri se relaciona con la postura que asume el sector del peronismo vinculado a los gobernadores, aunque aclaró que la parte dura de sus posiciones pasará en el próximo mes por la discusión del presupuesto en donde aseguró que ellos no votarán nada que pueda potenciar la conflictividad social y no tenga el visto bueno de Urtubey: “Nosotros no vamos a votar ningún presupuesto que vaya más allá de lo que el gobernador pueda acordar. Si no obstaculiza la viabilidad de la provincia, así será”, expresó.