Fue condenado a seis años y medio de prisión domiciliaria por el robo de caños del Gasoducto del NEA. Una imagen muestra que más allá de no salir, vive su vida con normalidad.
Sonrisa, pulgar levantado, botellas en el piso, el arbolito de Navidad a un costado, River-Colón de fondo. No parece ser la postal de alguien que cumple una condena. Sin embargo, es la foto de Jorge Enrique Prado, el ex intendente de Aguaray condenado a seis años y medio de prisión domiciliaria por el robo de caños del Gasoducto del NEA.
La fotografía que vecinos de Aguaray acercaron a CUARTO muestra al ex intendente con una actitud relajada, de disfrute, poco acorde a su situación judicial. Quizás las protestas por el fallo eran justificadas, después de todo. Prado no parece estar cumpliendo una condena demasiado fuerte.
En días de pandemia, cuando la vida puertas adentro es parte de la normalidad, la condena a Prado parece una burla. El ex intendente de Aguaray fue hallado culpable, pero parece libre.
