La Aduana lo dispuso el martes y – entre otras cosas – argumentó que las mineras subfacturan ventas al exterior para pagar menos regalías. Estas últimas aseguran que sólo una firma estadounidense realiza esa maniobra.
El martes se dispuso que el precio testigo de 53 dólares el kilogramo de carbonato de litio es para las exportaciones que tengan como destino Canadá, Estados Unidos, Hong Kong, Corea del Sur, China, Filipinas, Japón, Taiwán y Tailandia. La Aduana dijo que la decisión es clave porque siendo el recurso un commodity como la soja no existe un precio internacional; aunque también se remarcó que la medida busca desarticular las maniobra de las mineras que pagan regalías según lo que ellas dicen exportar, aunque para evitar pagos subfacturan ventas del recurso al exterior.
A dos días de la medida, la misma generó un temblor en el sector. Según informan medios nacionales como Ámbito cayeron las acciones de las compañías internacionales, hay enojo de las empresas con la decisión y también contra una multinacional estadounidense a la que acusan de desencadenar la intervención oficial por presuntas maniobras irregulares.
La multinacional apuntada es la norteamericana Livent, “Los primeros cuestionamientos a Livent surgieron de legisladores de Catamarca, provincia donde opera la compañía hace más de 20 años. Pidieron información a AFIP sobre la operatoria, acusándola de exportar litio a si misma a un valor mucho más bajo que el de mercado. El precio de la presunta subfacturación determina qué impuestos paga la compañía. En el mercado estiman que la empresa podría rechazar los cuestionamientos, debido a que no existían precios de referencia para el mineral”, resalta el medio citado.
De todos modos, la fijación de un precio de referencia para la exportación del mineral “escaló las fronteras argentinas y se sintió en todo el mundo, debido a las caídas que tuvieron las acciones de las empresas” destaca el mismo medio que culmina el informe del siguiente modo. “Según pudo saber este diario de un consultor que prefirió no ser mencionado, las compañías asiáticas de baterías de litio, que compran el carbonato en Argentina, ven con buenos ojos que haya “reglas claras”. El próximo proyecto en entrar en funcionamiento en el segundo semestre será Olaroz Cauchari de la minera Exar”.