lunes 13 de mayo de 2024
8.1 C
Salta

Gonzalo Teruel | “Cristina Fernández confirmó su centralidad en la escena política nacional”

En su habitual resumen político semanal en el programa Cuarto Oscuro, el periodista se refirió a las medidas desplegadas por el gobierno nacional y la carta que la vicepresidenta compartió el martes.

Como todos los viernes, el periodista político resumió la semana política en el programa radial que se emite por FM La Cuerda (104.5). Comenzó recordando una escena del debate en la Cámara de Diputados de la Nación por el Presupuesto 2021, cuando el diputado opositor, Fernando Iglesias, se dirigió en su discurso a las autoridades y tras decir que la Casa Rosada maneja “hasta al Papa” exhortó al oficialismo a que “gobiernen”.

Para Teruel, lo interesante de la semana fue que el gobierno: ¡gobernó! “Contra todo pronóstico, el ministro de Economía, Martín Guzmán, paró la suba del dólar y la sangría del Banco Central. Lo hizo de una manera que yo no comparto y muy peligrosa para el futuro (emitiendo bonos atados a la cotización del dólar oficial con lo cual los compradores más temprano o más tarde van a operar para que el dólar suba y usando “manos amigas” de empresarios que vaya uno a saber bajo que promesa del gobierno salieron a vender dólares en el mercado negro) pero no importa, hizo lo que tenía que hacer: reconocer el problema, pensar una solución y ejecutar esa solución”, resaltó.

“A la calma conseguida – veremos qué tan duradera – en el mercado financiero, el gobierno sumó otros hechos importantes: le dio media sanción al Presupuesto 2021 – que es un dibujo – sin que la oposición arme un escándalo y además puso en el centro de la escena al presidente Alberto Fernández con un anuncio importante: se incorporarán al beneficio de la Asignación Universal por Hijo cerca de 1 millón de niños y adolescentes hasta ahora sin cobertura estatal”, destacó.

Llegado a ese punto, Teruel se detuvo en la carta pública de Cristina Kirchner difundida a principios de la semana. “La vicepresidenta reconoció algo que aquí observamos desde hace bastante: ‘hay funcionarios que no funcionan’. La vicepresidenta también fue cínica cuando llamó a un amplio acuerdo para resolver los problemas del país. ‘Es de imposible solución (hablaba de economía) sin un acuerdo que abarque al conjunto de los sectores políticos, económicos, mediáticos y sociales de la República Argentina’ escribió Cristina que es incapaz de los más mínimos acuerdos. No va a suceder tal acuerdo. Oficialismo y oposición, empresariado, gremialismo y gobierno están cómodos en su mezquino desacuerdo”, sentenció.

“La vicepresidenta fue cruel al decir que Alberto Fernández no es un presidente títere. ‘No es fácticamente posible que prime la opinión de cualquier otra persona que no sea la del presidente a la hora de las decisiones’, escribió. A mí no me queda claro, lo pensé y lo pensé y no llegué a una conclusión, si es un respaldo y subordinación al presidente o una sutil forma de deslindar responsabilidades por un gobierno dubitativo y errático. Al final de cuentas, con su carta pública y el impacto que generó, Cristina confirmó su centralidad en la escena política nacional. De algún modo, con los reportajes que concedió semanas atrás, Macri hizo lo mismo. Y ese es el enorme problema de Argentina: sigue discutiendo el pasado. Cristina y Mauricio, Mauricio y Cristina, son el pasado. Son problemas viejos y viejas y fallidas soluciones. Difícil pensar un país mejor si las opciones siguen siendo Mauricio o Cristina, Cristina o Mauricio”, concluyó.

Archivos

Otras noticias