Los pescadores de la zona aseguran que las interrupciones que realizan los agricultores afectan el equilibrio del río. El gobierno los desmiente.
Pescadores que se desempeñan en el río Juramento aseguran que las interrupciones realizadas por los agricultores locales para captar agua que se destina a riego son perjudiciales para el equilibrio ambiental de la zona.
El conflicto tiene posiciones contrapuestas. Mientras los pescadores denuncian a los agricultores, el secretario de Recursos Hídricos, Oscar Dean, dijo que las tomas de riego son legales. Según informó FM Profesional, el funcionario dijo que los pescadores «están lucrando».
Uno de los pescadores, Alejandro Dumas, dijo que la actividad está registrada y que la principal protesta es la falta de regulación de las tomas e interrupciones del río. «El dorado no puede migrar», aseguró, y agregó que «en los últimos años hay menos peces». Dijo que no es «un tema de depredación» sino de desove por los cortes en el.