El nosocomio implementó un plan de contingencia ante la alta ocupación de camas y la saturación de las áreas críticas.
El hospital Materno Infantil se encuentra en una situación complicada por el incremento de los casos de salmonelosis, una enfermedad infecciosa que afecta principalmente a los niños. Debido a esto, el establecimiento ha adoptado una serie de medidas para garantizar la atención de los pacientes más graves y evitar el colapso del sistema sanitario.
Entre las medidas se encuentran la suspensión temporal de las cirugías programadas que requieren el uso de áreas críticas, la priorización de los pacientes con cuadros de gravedad o complicaciones en la guardia de emergencias y la afectación prioritaria de todo el personal a la atención de la contingencia, sin descuidar el normal funcionamiento de los servicios.
El gerente general del hospital Materno Infantil, Esteban Rusinek, informó que las medidas se tomaron ante la alta demanda en internación y consulta externa, que ha llevado al hospital al límite de su capacidad de internación y con saturación en las unidades de terapia intensiva e intermedia.
Asimismo, el funcionario recomendó a la población observar las medidas de prevención general, como mantener una rigurosa higiene de manos, asegurar la higiene de los alimentos, utilizar aguas seguras para el consumo, evitar el consumo de alimentos que no hayan sido refrigerados adecuadamente y consultar de manera temprana en los centros de salud ante cualquier síntoma de enfermedad.