El diputado amante de la mano dura y amigo de hablar de responsabilidad asistió a la Cámara a pesar de tener síntomas. Obligó a suspender la sesión de esta semana y puso en peligro a las personas con las que tuvo contacto.
Ignacio Jarsún demuestra que es más fácil hablar de moral y de responsabilidad que tener actitudes acordes a ese discurso. Es que el diputado provincial no estuvo a la altura de sus propias demandas de una sociedad mejor cuando no cuidó a nadie y asistió a sesionar a la Legislatura a pesar de padecer síntomas de Covid. Poco después su hisopado dio positivo y obligó a suspender la sesión de esta semana y algo peor: ya hay trabajadores contagiados.
Según pudo averiguar CUARTO, hay entre dos y seis trabajadores de la Legislatura contagiados. Y podrían ser más: todavía hay empleados que no obtienen el resultado de sus hisopados.
Se estima que son unos quince los trabajadores de la Legislatura que deberán hacerse pruebas. Algunos ya confirmaron su condición positiva. Otros están a la espera.
Además, hay aislados. Entre ellos el propio Jarsún, que debería haber permanecido en aislamiento cuando asistió a la sesion. Otro damnificado por esta actitud es el presidente de la Cámara, Esteban Amat, que hace dos meses debió ser intervenido de urgencia por una dolencia cardíaca.
Te puede interesar:
Apoyó linchamientos | Denunciarán a Jarsún por apología del delito
