La presidenta del partido busca reorganizar la tropa macrista en la provincia.
El macrismo salteño vive días de incertidumbre y división. Separado entre los que apoyan al gobernador Gustavo Sáenz y los que se oponen, el partido será intervenido en la provincia. La orden llegó desde su presidenta, Patricia Bullrich.
El Expreso informó que la decisión de Bullrich llegó después de que el apoderado partidario en Salta, Marcelo Montaldi, no respondiera a las autoridades y avalara la eliminación de las PASO en representación del PRO.
El PRO había tomado una postura contraria que pretendía que se refleje a lo ancho y largo del país. Pero Montaldi fue más allá, por lo que las autoridades decidieron intervenir el partido para trabajar de manera coordinada.
Cristian Ritondo, vocal primero del PRO, le informó a Bullrich que «hay un sector que está jugando a dos puntas y no responde al PRO sino al gobernador Sáenz, que ahora volvió a ser peronista». Bullrich entonces ordenó buscar inmediatamente a una persona que fuera fiel al macrismo para que se haga cargo del partido en la provincia.