El fantasma del desempleo desespera cada vez más a los trabajadores. Aseguran que ni el municipio ni el Grand Bourg deciden cómo resolver el financiamiento del organismo en el que trabajan 280 personas que asisten a 1000 personas por día.
El tránsito está cortado en la calle Buenos Aires – entre La Rioja y San Luis – por la protesta que protagonizan los trabajadores que viven la incertidumbre en torno a cuál será el destino del organismo que por día solía asistir a cerca de mil personas en situación de indigencia y requieren remedios, subsidios para el pago de servicios, bolsones alimentarios y elementos necesarios tras una situación de emergencia.
La modalidad del reclamo fue comprensiblemente en aumento: asambleas, pedidos formales, manifestaciones la semana pasada y hoy cortaron la calle y cuatro empleados se apostan arriba de los techos del edificio. “Hemos llegado a estas medidas empujados por la desesperación. Hoy tuvimos una reunión en el Centro Cívico Municipal y además de no salir satisfechos, sentimos que nos chicanean. Te recuerdo que la semana pasada le enviamos una nota al gobernador Gustavo Sáenz para que la provincia intervenga la Cooperadora y también estamos esperando algún tipo de respuestas. Estaremos aquí toda la tarde o roda la noche hasta que llegue la misma”, declaró a CUARTO Jorge Guerrero, uno de los delegados de los trabajadores.
Cómo se recordará, la fuente de financiamiento del organismo dejó de existir el 30 de noviembre pasado y desde entonces ni la municipalidad ni el gobierno provincial deciden de dónde saldrá los recursos que garantice el empleo y la asistencia a los sectores vulnerables operaba desde hace más de 40 años.