Tras lo anunciado por el gobernador ayer, vía internet se difunde un petitorio que exhorta: “Salteños: ¿queremos el aborto libre en Salta pagado con nuestros impuestos? Si la respuesta es NO, favor de firmar y divulgar”.
Ayer alrededor del mediodía, y tras el escándalo por la niña de 10 violada a la que no se le permitía abortar, el gobernador anunció en las redes sociales que la provincia finalmente iba a adherir al Protocolo para la Atención Integral de las Personas con Derecho a la Interrupción Legal del Embarazo.
No pasaron muchas horas hasta que también en las redes sociales comenzara a circular, también en las redes sociales, un petitorio para juntar firmas que cuestionaba la decisión tomada por el gobierno provincial. Bajo el título “Deje de asesinar bebés por nacer con nuestros impuestos y violando la Constitución”, en el sitio citizengo.org puede leerse el texto que argumenta por qué usted debería estar en contra de lo estipulado en la ley.
El texto elaborado por el usuario Moralnet (que en la misma página tiene un amplio historial de posteos antiaborto) se extiende y trata de dar explicaciones para que quienes ingresan estampen convencidos/as sus firmas en el petitorio.
Por ejemplo argumentan que “amparados en éste ‘derecho a matar a un inocente’ se están realizando DECENAS DE MILES DE ABORTOS de más de 12 semanas en todo el país, incluyendo Salta, por ejemplo, en el Hospital Provincial Materno Infantil”, al tiempo que piden cárcel para “los abortistas y sus cómplices”. Posteriormente enumeran una serie de datos de difícil corroboración estadística, como que “Nadie se suicidó jamás por haber dado a luz a un hijo pero hay miles de suicidios por haber abortado” o “Que el aborto sea ilegal protege no sólo al hijo sino también a la madre: tiene 4 veces más probabilidades de morir al año siguiente al aborto, porque sigue en una situación de abuso terminan asesinadas, porque la violencia del aborto lleva a violencia doméstica, alcohol, drogas, depresión, suicidio, etc”.
Al final se eleva una “carta personal” al señor gobernador de la provincia de Salta, en la que se lo interroga cordial y respetuosamente, al tiempo que lo interpelan con preguntas como “¿Acaso quiere ser recordado por la historia como un genocida de su propio pueblo?”, “¿Acaso ignora que según el Código de Derecho Canónico, quienes cooperan con el aborto procurado, como Ud. acaba de hacer, están excomulgados latae sentiae, es decir, automáticamente, sin necesidad de proceso judicial, y que si no se arrepiente antes de la muerte, con propósito de enmienda y confesión sacramental, será condenado al infierno eterno?” y finaliza con casi una amenaza: “¿Acaso ignora que la ciencia demuestra que existe el infierno?”.