Los precios cada vez más altos y la preferencia a comprar por kilo son factores que afectan a los comerciantes, quienes se ven obligados a reducir sus precios los sábados para evitar pérdidas. La falta de flujo de dinero y el encargo de menos mercadería por parte de los mayoristas agravan la situación.
Vendedores del mercado Cofruthos expresaron nuevamente a la prensa su preocupación por la disminución en las ventas y la escasa concurrencia de clientes. Durante un relevamiento de precios reciente, los vendedores manifestaron disminución en las ventas y escasa afluencia de clientes, lo cual también se pudo evidenciar en los pasillos vacíos, según informó El Tribuno. Ante ese medio, Eva Ramos, vendedora de frutas y verduras, lamentó la caída en las ventas y señaló que los clientes ahora compran la mitad o un cuarto de cajón, en comparación a meses o años anteriores.
Eva ha optado por ofrecer bolsas fraccionadas de 1/4 de cajón de diferentes productos, como mandarinas a $1400, bananas a $1500 y tomates a $1200. Sin embargo, comentó que la concurrencia al mercado sigue siendo baja, a pesar de encontrarnos en la mitad del mes, momento en el que se esperaría que los trabajadores apelen a su aguinaldo para abastecerse de frutas y verduras.
Uno de los clientes lamentó los precios cambiantes y más altos que encontró en comparación con la semana anterior. Otra entrevista dijo que experimentó una disminución en las ventas debido a los precios elevados, mencionando el caso del choclo, que pasó de costar $700 la docena a $1800. En ese contexto, los clientes optan por comprar más por kilo, e incluso los verduleros de barrio han dejado de llevar cajones, comentaron. Así también, los consumidores buscan estirar su dinero comprando en cantidades que les permitan abastecerse por más tiempo.
Como estrategia para evitar pérdidas, los vendedores se ven obligados a reducir los precios los sábados. Juana Coronado, también vendedora en Cofruthos, lamentó esta situación y mencionó que los mayoristas están encargando menos cantidad. Además, como ejemplo de la crisis, comentó que algunos vendedores de zapallo se vieron obligados a liquidar a $50 el kilo debido al exceso de mercadería. En el sector de huevos, la docena se vende a $700 y el cartón a $1300.
