Todos son parte de la Brigada de Investigaciones de Orán. Son investigados en el caso de un joven al que torturaron para que “entregara” al culpable de un robo en un supermercado.
Este jueves la noticia fue que la justicia ordenó la detención de 11 policías de la Brigada de Investigaciones de Orán. La misma se da en el marco de la causa que investiga la supuesta comisión de los delitos de privación ilegítima de la libertad, torturas y lesiones leves en concurso ideal. Días atrás,
Según detalló el Ministerio Público Fiscal de Salta (MPFS), la fiscala penal de Derechos Humanos, Verónica Simesen de Bielke realizó los pedidos de allanamiento, detención y secuestro a los que el Juzgado de Garantías 1 de Orán, hizo lugar.
Todo se deriva de lo sucedido el pasado 8 de abril en una habitación que está atrás del patio interno de la dependencia policial. Ahí llevaron a un joven detenido para que “testifique” en el caso de un robo perpetrado contra el supermercado Comodín. Las intenciones reales, eran que entregara a un compañero de trabajo. Para ello lo torturaron de varias maneras. Luego lo llevaron a “pasear” en una patrulla mientras lo amenazaban de muerte.
El MPFS señala que “cerraron la puerta y pusieron música a alto volumen, aunque pudieron escuchar gritos de dolor. Dos de los internos manifestaron que también fueron víctimas de torturas con bolsas en la cabeza y que los golpearon”. Luego indican que los policías “cometieron un claro exceso en el ejercicio de sus funciones y sin que existieran motivos razonables ni una orden de la autoridad competente, privaron ilegítimamente de la libertad ambulatoria al denunciante, a quien retuvieron desde las 18 del 8 de abril, hasta las 2:30 de la madrugada del día siguiente, esposado y sin que pudiera irse de la dependencia policial”.
Los imputados y detenidos
En entrevista radial, Simesen del Bielke comentó: “Según las investigaciones que llevó adelante el CIF, cinco personas participaron del delito de torturas contra el denunciante. Pero también como en la Brigada de Investigaciones había otros efectivos policiales, hemos ampliado las acusaciones y hemos pedido las detenciones tanto del jefe de la Brigada, como al jefe de servicios, que son los dos encargados de la comisaría. En este momento se están realizando las audiencias de imputación por el delito de omisión de prevenir el delito de torturas, porque eran quienes podían hacerlo. Y respecto a otros efectivos que no tenían la competencia para evitarlo, los hemos imputado por la omisión de denunciar el delito de torturas. Porque si bien no podían detener el delito, sí están obligados como funcionarios a denunciar estos hechos que se realizaban en un lugar donde ellos estaban prestando revista en ese momento”.