El Comité Provincial de la Tortura informó que hay prisiones sin camas, ni duchas o colchones. En el interior de Salta la situación es aún peor.
La situación en las cárceles salteñas es pésima. Los números oficiales parecen una exageración, pero lo cierto es que son una tristísima realidad. Sólo en la Alcaidía hay 800 detenidos en un espacio de 350.
Al dato lo arrojó Rodrigo Sola, del Comité Provincial de la Tortura, que detalló que la población carcelaria en Salta en general se excede en un 40 por ciento.
Sola dijo que la sobrepoblación y el hacinamiento se profundizan en el interior de la provincia y sobre todo en el norte, donde no se garantizan las condiciones sanitarias y edilicias mínimas.
«No tienen baños, duchas, camas, colchones y en algunos destacamentos deben turnarse para dormir porque no tienen colchones para todos», dijo en FM Aries.
Se dictó un habeas corpus para las comisarías de Tartagal y Embarcación para que los detenidos sean trasladados y que se amplíe el régimen de visitas. Sola dijo que se logró que las autoridades del Servicio Penitenciario se dispongan a cerrar una celda de castigo y cambiar la función de castigo de otra en la Unidad Carcelaria 4 de mujeres.