La campaña nacional inició el 1 de octubre y contempla a niños y niñas de entre 13 meses y 4 años. La estrategia busca evitar la reaparición de brotes de estas enfermedades ya erradicadas en Argentina.
El primero de octubre comenzó, de forma simultánea en todo el país, la Campaña Nacional de Vacunación contra esas patologías y durante los primeros doce días de inoculación, Salta se posiciona como la segunda provincia que más vacunas administró en la Argentina, totalizando 35.223 biológicos, lo que representa el 39,8% de la población objetivo. En primer lugar se encuentra Jujuy.
La jefa del programa de Inmunizaciones, Adriana Jure destacó “el gran trabajo y el esfuerzo de los equipos de salud de toda la provincia, quienes están aplicando vacunas de lunes a lunes; en hospitales, puestos móviles, casa por casa, jardines de infantes, etc; con gran vocación de servicio, para llegar a toda la población objetivo”. Agregó que “la pandemia, sin dudas, nos demostró el poder que tienen las vacunas para salvar vidas. Es admirable el acompañamiento de la comunidad y de las familias que llevan a sus niños a los vacunatorios, para que estén protegidos y más seguros”.
En el país, el sarampión, la rubéola y la poliomielitis son enfermedades que están eliminadas, esto quiere decir que ya no circulan. Sin embargo, aún existen brotes en otras partes del mundo. La campaña es gratuita, obligatoria y se extenderá hasta el 13 de noviembre, en la cual se administra una dosis extra de la vacuna Triple Viral y una de la antipoliomielítica inactivada, independientemente de las dosis recibidas previamente.
Para darse las vacunas, los padres deben acompañar a sus hijos, llevando el carnet de vacunación y Documento Nacional de Identidad. No se requiere orden médica para recibir los inmunizantes y se pueden coadministrar junto con la vacuna contra la COVID-19 y con cualquiera contemplada en el calendario nacional.