sábado 27 de abril de 2024
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Trabajo esclavo en Salta | Vecinos de El Galpón socorren a 30 peones rurales explotados en una productora de limones

Oriundos de Formosa y miembros de comunidades originarias, fueron traídos para la cosecha por un productor tucumano denunciado por lo mismo el año pasado. La situación se supo cuando los peones salieron a pedir alimentos y abrigo por la zona.

Vecinos de la zona relataron a los medios que los trabajadores rurales «están a la deriva» y fueron vistos en la zona buscando abrigo y alimentos en la basura. Según los mismos vecinos, el precario hospedaje en donde se hallan los peones rurales carece de servicios básicos y es propiedad de Adriana Córdoba. A partir del alerta, la policía llegó al lugar y una de las personas refirió que el grupo de casi 30 personas llegaron desde Formosa para trabajar en la cosecha del limón, que todos se encontraban en condiciones indignas “en el interior de una vivienda, con un solo sanitario, sin luz, sin abrigo y sin agua caliente».

Según denunció un trabajador, el empresario responsable sería el tucumano Pablo Padilla, presidente de la Asociación Citrícola del Noroeste. Padilla ya fue denunciado por una situación idéntica el año pasado también por trabajadores migrantes formoseños de las naciones que fueron llevados a las empresas Padilla Citrus y Dynamic Agroservices. Consultado por la sección local del diario Página 12, Padilla dijo que las nuevas denuncias que lo involucran contiene información «incorrecta y mal intencionada».

En primera instancia intervino la policía ante el llamado de uno de los damnificados al 911. La Policía de Salta indicó a la sección local del diario Página 12 que dieron intervención a la Fiscalía Penal Nº 1 de Metán, a cargo de Sergio Castellanos; luego empezó a actuar el fiscal Toranzos. Desde el Ministerio Público Federal no dieron mayor información del caso al medio citado.

Fueron varios los vecinos que brindaron testimonios sobre la deplorable situación en la que viven los obreros: “están de remera, con alpargatas y zapatillas rotas. No tienen como pasar el frío. A esta hora hace un frío impresionante», expresó una de las vecinas al medio citado. Ante ello, en El Galpón iniciaron una colecta solidaria para ayudar a los trabajadores rurales, que en su mayoría son jóvenes.

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