Deberá pasar diez años tras las rejas. La víctima tenía doce años al momento del hecho.
Ángel Galarza, pastor evangélico de Tartagal, fue condenado a diez años de prisión efectiva por violar a una niña de doce años.
El hecho sucedió en febrero del año pasado, cuando el hombre, amigo de la infancia del padre de la víctima, pasó a buscar a la niña para llevarla al templo, donde cursaba estudios. En el camino detuvo el auto y abusó de ella.
La condena se dio en la Sala 2 del Tribunal de Juicio de Tartagal. El cargo es por ser autor del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por su condición de encargado de culto.
El Tribunal de Juicio dispuso que el acusado se mantenga en prisión domiciliaria hasta tanto quede firme la sentencia y se remita al Juzgado de Ejecución, que determinará la modalidad de cumplimiento de la pena.