De los 60 escaños en juego, 38 quedaron para candidatos del gobernador salteño.
Aunque fue la categoría que menos interés despertaba en la población, el gobierno provincial respira tranquilo con respecto a su reforma de la constitución limitada que según las encuestas la gran mayoría del electorado salteño no sabía de qué se trata y qué se reformará.
No obstante, como en la general, el triunfador a través de sus dos frentes fue el oficialismo provincial, que se quedó con 38 de los 60 lugares en juego. Mientras que entre el Frente de Todos, Salta para Todos y el Frente Grande, alcanzaron 11 escaños, y Juntos por el Cambio, otros cinco.
Las restantes cuatro bancas que se disputaron en Capital se distribuyeron entre Patricia Pomares, de Salta Independiente; la diputada nacional Lía Verónica Caliva, por Salta para Todos; María Tusnelda Castañares (UCR) y Daniela Planes (Frente de Izquierda y de Trabajadores).