Las científicas del país están en desventaja con respecto a sus colegas varones. Reciben menos fondos, publican en revistas de menor impacto y pocas acceden a cargos jerárquicos, según datos del Proyecto SAGA de la Unesco en Argentina.
“Las mujeres argentinas en ciencia y tecnología dirigen 26,7% menos proyectos de investigación y desarrollo. En promedio, solicitan y reciben la mitad del financiamiento con respecto a los varones. Publican 7% menos en revistas de mayor impacto y visibilidad y acceden en menor medida a los altos cargos en la carrera de investigador”. Estos son algunos de los datos sobre la situación de las mujeres en ciencia y tecnología que arrojó el Proyecto SAGA (STEM and Gender Advancement) de la Unesco, que tuvo a Argentina como país piloto.
Parte del mismo fue analizado hoy en un artículo publicado en el portal Perfil que precisó que los datos se obtuvieron a través de una encuesta enviada a 320 organismos del sistema científico argentino, el análisis de 34 mil currículum vitae cargados en la base CVAR y de 18 mil proyectos de Promoción Científica y Tecnológica, en Conicet y el INTA.
“Si bien las mujeres constituyen solo un 28% de los investigadores existentes en el mundo, en Argentina la cantidad de investigadores está cerca de la paridad de género. Pero hay mucho que mejorar y ese es nuestro objetivo”, sostuvo María Guillermina D’Onofrio, directora nacional de Programas y Proyectos.
En este sentido, explicó que según los datos recolectados a través de Cvar, hay un 60,2% (20480) de mujeres y un 39,8% (13484) varones que hacen investigación. Sin embargo, solo el 10,5% de las autoridades de organismos de ciencia y tecnología son mujeres. Asimismo, “las elecciones de campo de estudio e investigaciones reflejan limitaciones impuestas por roles y estereotipos de género”, dado que las áreas con mayor presencia de mujeres son las ciencias médicas y de la salud, humanidades y artes y ciencias sociales, mientras que en último lugar se encuentran las ingenierías y tecnologías.
Otro de los datos que reveló el estudio es que las investigadoras que dirigen proyectos científicos solicitan y reciben en términos generales un 25% menos recursos que sus colegas varones. “Creo que esto tiene que ver con que hay más mujeres con proyectos joven (PICT-Joven) que tienen mucha menos asignación. Y también que el Conicet tiene una lógica de entregar fondos por tamaño de grupos de investigación y por ahí las mujeres tienen proyectos más pequeños o unipersonales. Pero es solo una hipótesis”, le dijo a PERFIL Erica Hynes, ministra de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de Santa Fe y quien fue coordinadora científica de la investigación.
Con respecto al resultado de que las mujeres publican 7% menos en revistas de mayor impacto y visibilidad, Hynes opinó que hay que analizar ese dato con cuidado: “No pasa lo mismo en todas las disciplinas, en ingeniería las mujeres publican mucho mejor que los varones”. Las especialistas remarcaron que la intención es no quedarse con el diagnóstico sino avanzar en un trabajo coordinado y articulado del sistema para acortar la brecha de género y mejorar la situación de las investigadoras.