Los mismos fueron anunciados ayer por Alberto Fernández y se otorgarán a través del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Serán para herramientas de trabajo y para “desendeudar” a las familias argentinas.
Fue el primer anuncio formal que hizo Alberto Fernández como presidente en el discurso que dio ayer ante la Asamblea Legislativa: «vamos a implementar un sistema masivo de créditos no bancarios que brinde préstamos a tasas bajas». Hoy el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, explicó a los medios nacionales en qué consisten los mismos y acá resumimos algunos de sus aportes.
– «Van a ser microcréditos, no bancarios, para comprar herramientas o insumos de capital. Para que el carpintero tenga una sierra circular o una señora una máquina de coser, hasta máquinas más grandes».
– «Abarcará al 40% de la población, que trabaja por su propia cuenta, que es gasista, carpintero, plomero o que cose ropa en la casa. Serán a tasas bajísimas, del 2% o 3% anual».
– «También servirán para desendeudar a estas familias, que ahora toman créditos al 200% de interés anual».
– «Buscamos poner en marcha el mecanismo de producción desde abajo, con máquinas y herramientas».
– «Serán microcréditos, a través del ministerio de Desarrollo Social, por fuera de los bancos y también por fuera de la ANSeS».
Respecto a los créditos ANSeS para los beneficiarios de planes sociales o jubilados, que fueron récord durante el macrismo, sobre todo en los períodos pre-electorales de 2017 y 2019, en el kirchnerismo cuestionan que «tenían tasas cercanas al 50%. Hoy tenés a muchísimas familias pobres endeudadas. Lo poco que les entra es para pagar deudas». Parte de los nuevos microcréditos, se supone, servirían para aliviar también a estos grupos.