Reclaman por la renovación de contratos prontos a vencer. Aseguran que hay casi 200 empleados con inestabilidad laboral.
El caso de estas dos trabajadoras de la salud es el de muchos otros precarizados de la salud en el norte provincial. Fueron contratados provisionalmente el año pasado por parte del Ministerio de Salud Pública dada la pandemia. Están preocupados porque a fin de mes vencen estos denominados “contratos COVID”.
En ese sentido, durante las pasadas horas estas dos enfermeras se encadenaron en la puerta del hospital San Vicente de Paul a modo de reclamo. Piden estabilidad laboral. Hasta ahora no saben si serán recontratadas.
Una de las encadenadas comentó a La 10 Orán: “no tenemos respuesta en la renovación de nuestros contratos, estos van a finalizar el próximo 31 de marzo, estamos con bronca nadie nos responde. Somos alrededor de entre 150 a 200 empleados de la salud con inestabilidad laboral”.
Al respecto, la delegada de ATE, María Julia Pizola, comentó a la misma emisora: “la semana venidera, el día martes 16 de marzo tienen pactada una reunión con el ministro de Salud Juan José Esteban en la Capital y ojalá podamos llegar a un acuerdo”.