Ángel Causarano hizo rendir honores a Juan de la Cruz Kairúz, ex DT y represor involucrado en la desaparición del médico Luis Arédez, de Ledesma.
El Concejo Deliberante de la ciudad de Salta desató un escándalo al homenajear al deportista y director técnico Juan de la Cruz Kairuz, el mismo que está encausado como miembro de la patota que secuestró y desaparició al médico Luis Arédez, en la ciudad jujeña de Ledesma. Enterado del reconocimiento, Ricardo Arédez, hijo del médico desaparecido, ratificó que Kairuz participó del secuestro de su padre, lamentó que una institución democrática le haga un reconocimiento y le pidió al ex DT que en los años 70 era policía, que al menos confiese dónde está su padre para poder sepultarlo como “seres humanos».
Consultado por la sección local del diario Página 12, Causarano dijo que no sabía que Kairuz está involucrado en violaciones a los derechos humanos, aseguró que lo buscó en la red pero no vio nada de eso, que lo conoció en Ledesma, que para él es «una buena persona»; luego habló de que en los años del terrorismo estatal hubo una «guerra», aunque enseguida se desdijo y terminó pidiendo disculpas.
No es la primera vez que personas y hechos que atentaron contra la democracia y los Derechos Humanos son reconocidos en ese cuerpo y que los involucrados alegan luego ignorancia. Durante el año 2017 fue casi la regla. En aquel año se declaró “Ciudadano Destacado” al comisario Claudio Burgos, juzgado por el homicidio de un vecino de Barrio Sarmiento durante un operativo policial. “Ha llegado el momento de valorar a los hombres y las mujeres de la fuerza policial, que con capacitación y vocación arriesgan su vida al servicio de la comunidad” argumentó durante el acto de distinción el entonces concejal Andrés Suriani, impulsor de la resolución de premiación. Burgos estaba acusado de homicidio en el desempeño de sus funciones y estuvo preso en Villa Las Rosas.
El mismo Suriani había promovido ese año el reconocimiento al periodista Nicolás Kasanzew, corresponsal del viejo ATC en la Guerra de Malvinas y responsable del mensaje triunfalista que transmitía el gobierno militar a los argentinos pese a la inevitable derrota en aquel conflicto bélico del Atlántico Sur. Kasansew había llegado entonces a la ciudad para dar la charla “Malvinas, otra mirada desde dentro” auspiciada por el Colegio San Pablo y organizada por el Instituto Humanista de la Santísima Trinidad.
Durante el año 2016 había ocurrido lo mismo. Suriani promovió la reivindicación del “Combate de Manchalá” que se dio en el marco de las acciones que culminaron en el terrorismo de Estado en nuestro país. Aquella vez, el proyecto de Suriani fue acompañado por el voto de David Leiva, quien luego se justificó diciendo que no sabía lo que se estaba discutiendo.
La historia se repite y por ello cobra vigencia lo que decía el periodista Gonzalo Teruel en el año 2017: “dedicar horas para analizar la persona a reconocer, es lo mínimo que se espera de un concejal. Ni siquiera hace falta que vaya a la biblioteca o se someta a grandes faenas investigativas, con sólo prender la computadora o el teléfono celular es suficiente: la doctora Wikipedia y el profesor Google orientarán su tarea”.
