Ubicada en la Escuela Agrícola, la casona donada por la familia Güemes, hoy se encuentra malograda. Hace varios años anunciaron proyectos para refaccionarla, pero hasta ahora no se concretaron.
Un video publicado en el canal de YouTube de El Tribuno, en 2013, ya mostraba el estado de deterioro del edificio. Hoy la foto publicada por el mismo medio comprueba que la condición ha empeorado.
Un paisaje lúgubre hace que la casa del prócer parezca más una casa del terror que un monumento histórico nacional, como la declararon en 1943.
La estructura data del siglo XVIII, y sirvió de campamento al ejército gaucho años después, cuando la compró el entonces el gobernador Martín Miguel de Güemes. Fue un obsequio para su esposa Carmen, de ahí el nombre Finca El Carmen.
El prócer residió un tiempo en la casa y después quedó como parte de la donación que hizo la familia Güemes, “quienes donaron todo este predio para actividades educacionales. Por eso se crea la Escuela Agrícola”, comentó en 2013 el Arquitecto Carlos Demergassi, quien en ese momento trabajada junto a María Beatriz Blanco en el diseño de un proyecto de refacción y reutilización de la casa que nunca fue concretado.
Blanco, que en ese momento era subsecretaria de Desarrollo Metropolitano de Salta, le narraba al diario que para septiembre de ese año esperaban tener listo el proyecto y así conseguir financiamiento. Algo que evidentemente, hasta ahora, no ha sucedido.
