La caída de los salarios y la inflación provocan un combo durísimo y continúan sumando incertidumbre.
Los salarios caerán hasta un 16 por ciento a fin de año y la inflación mayorista superó el 50 por ciento en el último año. Son apenas dos datos recientes que se suman a la terrible catarata de números negativos de la economía argentina.
El diario Página 12 informó este jueves que el poder adquisitivo de los trabajadores registrará una contracción de entre 7 y 16 por ciento al finalizar 2018. Agregó que el aumento de precios mayoristas en los últimos doce meses alcanzó a 51,4 por ciento. En agosto fue del 4,8 por ciento y seguirá subiendo antes de fin de año.
El sector más castigado será el de la construcción, mientras que en el ámbito público, en la industria de la alimentación, el sector textil y la seguridad privada los asalariados llegarán a diciembre con un deterioro del 15 por ciento.
La plata vale menos y todo cuesta más. El matutino informó que habría que remontarse muy atrás en el tiempo para encontrar un registro similar, que llevaría a una comparación con la “híperinflación” que sufrió el gobierno de Raúl Alfonsín a fines de los 80, antes de su salida anticipada.