Se da por descontado que el presidente Alberto Fernández prepara el proyecto para legalizarlo. Los celestes admiten que no pueden evitar una derrota en diputados, pero creen que volverán a frenar la ley en el Senado.
Aunque el presidente prometió durante la campaña que enviaría un proyecto de ley para legalizar el aborto, nada dijo del tema en su discurso del 10 de diciembre ante la Asamblea Legislativa. Su omisión desorientó a militantes a favor del proyecto que, sin embargo, confían que el presidente ya prepara el proyecto y para acelerar el proceso organizaciones como la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito planea para febrero una manifestación para que Alberto no olvide sus promesas.
“No esperarán a la habitual marcha del día de la mujer, el 8 de marzo, cuando imaginan que ya habrá una agenda para iniciar el tratamiento parlamentario de la interrupción legal del embarazo (IVE) y esta vez con muchas expectativas de ganar”, enfatizo en su edición de hoy el sitio La Política Online.
En ese marco, ya se ejecutan poroteos que permitan pronosticar una eventual votación. “En el Senado Juntos por el Cambio está más verde que antes, porque reemplazó a los dos porteños que votaron en contra (Federico Pinedo y Marta Varela) por Martín Lousteau y Guadalupe Tagliaferri. Se sumarían a su causa votos de los recién asumidos por el Frente de Todos como Silvia Sapag (Neuquén) y Nora Giménez (Salta)” resalta el medio citado que, no obstante, advierten que los celestes admiten que no pueden evitar una derrota en diputados, pero creen que volverán a frenar la ley en el Senado, donde Alberto podría garantizarla si suma más peronistas.
Los poroteos de Unidad Provida, la ONGs de organizaciones que rechazan el aborto, descuentan una derrota «hasta por 20 votos» en Diputados, pero se siguen viendo triunfadores en el Senado con la ayuda de varios de los nuevos. Cuentan de su lado a la entrerriana del PRO Stella Olalla y a los peronistas Sergio Leavy (Salta), Antonio Rodas (Chaco) y Roberto Mirabella (Santa Fe). Pero esta vez influirá la postura del presidente, que a diferencia de su antecesor no se declaró neutral.
En 2010, el matrimonio igualitario fue sancionado con telefonazos de Néstor y Cristina a los senadores y tal vez la historia pueda repetirse si la IVE corre riesgo de volver a caerse en esa Cámara. Deberá chocar con algunos gobernadores que hace dos años impulsaron la corriente «Peronistas por la Vida» como Jorge Capitanich (Chaco) y Gildo Insfrán (Formosa), a quien responde el jefe del bloque Todos del Senado, José Mayans.
Alberto ya puso manos a la obra para contener heridos: el viernes recibió a los referentes de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la República Argentina (Aciera), les propuso sumarse a trabajar en el plan contra el hambre y les confirmó que en pocos meses el aborto los tendrá en veredas opuestas.