Mientras referentes del bloque que conduce Sergio Massa anunció que pedirán cambios en el articulado, el salteño que preside el interbloque Argentina Federal confirmó que algunos de los suyos se abstendrán a la hora de la votación.
Fue la diputada Graciela Camaño quien declaró que su bloque «no obstruirá» el presupuesto en el Congreso pero que pedirán cambios en el articulado. Ese anuncio más el conteo de votos que no es muy holgado activó las alarmas en el gobierno nacional que todavía recuerda un antecedente peligroso como lo fue la ley de blanqueo: en pleno debate en particular Felipe Solá logró introducir un cambio en el texto de la ley que excluía del blanqueo a los familiares de funcionarios y obligó a que el propio Macri vetara ese artículo.
Lo que el massismo quiere pedir es beneficios para Pymes, pero en Cambiemos no piensan ceder en ese punto. «Metimos las retenciones para llegar al déficit cero, no para repartir fondos y comprometer ese objetivo», explicaron a La Política Online desde la bancada macrista que sin embargo se preocupa porque hasta hace unas semanas consideraban que los 21 diputados massistas no entorpecerían en nada la sanción del presupuesto.
De allí que para evitar contratiempos, en el Gobierno las fichas están puestas en el interbloque Argentina Federal que preside el salteño Pablo Kosiner y responde mayoritariamente a los gobernadores informa el mismo sitio que luego detalla un poco el poroteo que ejercitan en el oficialismo: Cambiemos tiene 108 diputados, suma otro 3 del bloque de Martín Lousteau y en su último punteo creen llegar cómodo a 135 votos para aprobar el presupuesto.
Son 6 por encima de la mayoría simple, pero los líderes legislativos prefieren una cifra más holgada para evitar que alguien cambie algún artículo, sume al resto y lo complique todo. De allí que la mira está puesta en el interbloque Argentina Federal que tiene 33 miembros, está referenciado en gobernadores pero también hay peronistas sueltos como los jujeños Carolina Moises y José Luis Martirena, el mendocino Pedro Miranda o los bonaerenses Diego Bossio y Eduardo «Bali» Bucca. «No creo que haya rechazos al presupuesto. Habrá votos a favor y algunas abstenciones, en el caso de diputados que no trabajan con gobernadores, es decir, que son oposición en sus provincias», anticipó Pablo Kosiner.
De todos modos, Rogelio Frigerio aún debe convencer a muchos gobernadores de apoyar el presupuesto y la adenda al consenso fiscal que enviará en los próximos días en el Senado. Los más duros son Carlos Verna (La Pampa), Juan Manzur (Tucumán), con 2 y 3 diputados dentro del interbloque de Kosiner. Son las abstenciones que esperan en Cambiemos, como también la de algunos miembros del kirchnerismo que ya supieron ayudar en otros presupuestos, como los formoseños. O al dúo de catamarqueños Gustavo Saadi y Silvia Ginnochio.