Nueve trabajadores del sector barrido fueron cesanteados hace tres meses sin ningún motivo. Aseguran que es una represalia por haber reclamado con un paro por mejores condiciones laborales.
Desde la medianoche nueve personas permanecen encadenadas al portón del edificio municipal. Hasta hace tres meses eran trabajadores de planta permanente con alrededor de ocho años de antigüedad, pero tras un reclamo seguido de un paro por mejoras laborales -que fueron ganadas-, sospechosamente terminaron despedidos sin previo aviso. Aducen que sería una maniobra de disciplinamiento por parte del intendente Jorge Mario Guerra en connivencia con los gremios afines al jefe comunal. Ahora piden la reincorporación inmediata de las y los trabajadores cesanteados.
Maricel Ortiz, una de las trabajadoras despedidas y que se mantiene encadenada en la puerta de la municipalidad de Colonia Santa Rosa, conversó con CUARTO para detallar el reclamo que llevan adelante junto a otros nueve compañeros extrabajadores del sector barrido.
Tras el reclamo que llevaron adelante las y los municipales de Colonia Santa Rosa durante el mes de abril, según comentó Ortiz, “se firmó un acta en el Ministerio de Trabajo en la que se ponía la no persecución laboral, el no descuento a los días de paro, no al cambio de horarios ni sector de trabajo y bueno, dos semanas después de haberse levantado el paro y haberse conseguido lo que se estaba reclamando, este señor [por el intendente Guerra] nos cambió de horario, y después nos mandó una nota de cesantía sin haber hecho sumario administrativo ni seguir los pasos legales”.
Ortiz hace hincapié en que ya llevan tres meses de reclamo. Incluso el gobierno provincial tiene conocimiento de lo que sucede; también conversaron con el presidente de la cámara baja, Manuel Santiago Godoy. Precisamente en ese recinto legislativo el Partido Obrero presentó un proyecto de resolución para la reincorporación de los trabajadores. “Pero el intendente hizo caso omiso a todo”, asegura Maricel. “Nosotros hablamos hasta con el gobernador, con el presidente de la cámara de diputados, e incluso con el director del ministerio de trabajo, que es el señor Batule; todos se había comprometido a ver la situación, a hablar y no pasó nada, él [por el intendente] sigue en su misma postura”, se lamenta.
“Nosotros vamos a permanecer acá hasta las últimas consecuencias, lo único que pedimos es que nos devuelvan nuestro trabajo, no es un capricho, solo pedimos que nos devuelvan el trabajo”, finalizó.