Admirado sin fisuras por sus votantes, el presidente ya es reconocido por quienes no lo votaron e incluso por los que hicieron campaña en contra del Frente de Todos. Desde intelectuales brillantes como Beatriz Sarlo hasta Susana Giménez.
Hace días que las consultoras muestran que las medidas adoptadas para contener la expansión del virus gozan de un extendido consenso. El dato no puede sorprender, pero sí sorprende que según los guarismos nacionales 7 de cada 10 votantes de Macrì están de acuerdo o muy de acuerdo con la forma en que se está manejando el gobierno nacional. Fernández, en definitiva, pilotea la crisis con una calma que sorprendió a muchos y satisfizo a casi todos.
Esa situación empezó incluso a ser señalada públicamente por celebridades que siempre manifestaron sus disidencias con respecto al peronismo en general y el kirchnerismo en particular. Algunas de ellas de enorme vuelo intelectual como es el caso de Beatriz sarlo, quien ayer en su columna dominical titulada “Suspenso” (diario Perfil) le dedicó un párrafo al presidente.
“A Alberto Fernández, que estuvo a la altura de los desafíos con decisión y sin grandes gestos teatrales, le deseo que los supere, como fueron superados en ese año 1871, con inteligencia y suerte, ya que las dos son necesarias. Si le sale al Gobierno, también nos saldrá a todos nosotros. Aunque la palabra “todos” hoy carezca del significado inclusivo y optimista que tenía hace pocas semanas”, escribió ayer la autora de “Escenas de la vida posmoderna” y mundialmente reconocida crítica literaria.
En el otro extremo del rigor intelectual, la furiosa antiperonista Susana Giménez manifestó en una programa especial de cuarentena conducido por Rodolfo Barili y Cristina Pérez lo siguiente: “Yo tengo la impresión de que esta especie de grieta… grietón, que teníamos, se ha achicado muchísimo, muchísimo en estos días. Antes estábamos como poseídos los que no habíamos votado a Fernández, y ahora, yo estoy muy contenta con lo que está haciendo, es un tipo calmo, que hace cosas… me parecen todas las medidas buenas”.
Tal situación se ve favorecida por el hecho de que varios medios de Europa y Estados Unidos han puesto al Presidente argentino como ejemplo por su respuesta a la crisis, aun cuando sea inevitable preguntarse si ese apoyo se mantendrá en el tiempo y si se extenderá a todos los aspectos de la gestión oficial. Pero lo cierto hoy, es que Alberto Fernández se ha convertido en el Gran Capitán del país en medio de esta crisis.