Entre otros datos alarmantes está que en el penal de Villa Las Rosas hay más de 1400 personas detenidas, cuando la capacidad del penal es para 1000.
A la superpoblación que se da en el principal penal de la provincia hay que sumarle el caso de la Alcaidía General, que tiene actualmente 700 detenidos cuando su capacidad es para 300.
En 2008, la población penitenciaria provincial superaba los 1700 internos y transcurridos 10 años, se incrementó en un 90% y llegó a más de 3200.
El procurador general de la provincia Abel Cornejo resaltó que “el salto se produce en 2014, con la adhesión a la ley de microtráfico, aunque no es el delito de mayor incidencia (cuarto en cantidad de casos), pero sí provocó un aumento exponencial”.
“En 2018 había 440 presos por microtráfico en Salta, eso nos da una idea de que si entran 440 presos más en un solo año, cuánto puede ser el aumento de la población carcelaria en ese sentido”, remarcó.