Ocurrió anoche a las 1.30. La víctima se llama Eduardo Jesús Mamaní. “Fueron tres o cuatro puntazos que esquivé, pero uno pasó directo a mi cuello y agaché la cabeza e ingresó por la mejilla, de lado a lado”, relató el trabajador.
El taxista declaró desde su casa a El Tribuno los detalles del violento episodio que vivió en avenida Independencia y el cruce con Ituzaingó por un asaltante solitario. «Yo no había visto que venía armado, él sacó el cuchillo cuando estuvo delante mío. Al principio me asusté, quise decirle que no tenía recaudación, pero ahí mismo me hirió. Fueron tres o cuatro puntazos que esquivé sacándole el ángulo con los brazos, pero uno pasó directo a mi cuello y agaché la cabeza e ingresó por la mejilla, de lado a lado. Me vi ensangrentado y el ladrón se apoderó de mi billetera, pero no de mi celular.
Salí del auto y traté de parar la sangre con la rejilla de limpiar el parabrisas, pero nada, me estaba ahogando porque la sangre fluía hacia mi garganta», relató. «Como pude balbucee al 911 mi situación. Tuve miedo, creía que me había dado también en la garganta, así que me subí al auto y no esperé al 911 y me dirigí al San Bernardo, cosa que había dicho al operador antes de cortar. Por suerte me estaban esperando los doctores, los enfermeros y rápidamente me asistieron.
No había caso con parar la hemorragia, así que el médico cauterizó la herida traspasando su dedo por la mejilla para poder suturar del lado exterior. Luego un odontólogo suturó el interior de mi boca. Fue horrible. Estuve a un paso de que me mataran en la calle por solo 1500 pesos. Hace falta más seguridad y poner fin a la droga, porque quien me atacó estaba sacado, no pude defenderme».