Cuando el gobernador anunció que habría cambios en su gabinete, el nombre de Marcelo Domínguez quedó en la mira. Hoy presentó su renuncia tras dos años de una gestión opaca ante el crecimiento de delitos propios del crimen organizado.
“No es un dato menor que he llegado a los dos años de gestión, con el desgaste lógico de los años que los tengo bien puestos y también con todo lo que significa el complejo tema de la seguridad en un contexto económico y social muy difícil”, expresó Domínguez.
Entre los logros, destacó la duplicación del parque automotor de la policía y el proyecto de creación de un nuevo sistema penitenciario que incluye la construcción de una alcaidía y una unidad para alojar a personas de alto riesgo. “Estamos muy satisfechos con el trabajo realizado, gracias al respaldo del gobierno de la provincia».
En su despedida, también manifestó que fue el ministro de Seguridad que más tiempo estuvo en el cargo dentro del gobierno de Gustavo Sáenz, agradeciendo la oportunidad de servir a la comunidad salteña. “Agradecerle a Gustavo la confianza que tuvo de convocarme, sabiendo que venía de un ámbito totalmente diferente como el Poder Judicial», comentó.
Finalmente, el ahora exministro expresó su satisfacción por haber podido cumplir con la misión de proteger la seguridad de los salteños y por haber trabajado en la implementación de políticas públicas eficaces. «Ha sido un honor haber servido a Salta, una provincia que me ha dado tanto», concluyó.