Inmerso en un profundo silencio en medio de hechos que dan cuenta del avance narco en la provincia, Marcelo Domínguez dio la cara para anunciar que los exámenes psicológicos a los uniformados serán obligatorios a partir del año próximo.
La policía de Salta fue noticia durante el fin de semana. El viernes un efectivo se suicidó mientras prestaba servicios en la residencia del gobernador en Finca Las Costas; mientras el domingo a la noche un joven aspirante fue hallado sin vida y con un disparo en la Escuela de Suboficiales ubicada en Villa María Ester. Se investiga si se trató de un procedimiento erróneo o si fue intencional.
En ese marco se dio la inauguración de la Base Operativa de Infantería en Rosario de Lerma. Hasta allí llego el ministro de Seguridad Marcelo Domínguez, quien adelantó que los efectivos de las fuerzas deberán realizarse exámenes psicológicos anualmente. «Contamos con equipos de psicólogos disponibles las 24 horas en distintas áreas, como la policía, la escuela de formación y el 911», señaló Domínguez en los días posteriores a las muertes de los efectivos mencionadas.
Que Domínguez haya levantado el perfil no deja de ser una noticia, habida cuenta que desde hace tiempo guarda silencio sobre las causas que dan cuenta del avance narco en la provincia. Las últimas evidencias surgieron a partir del juicio que se le sigue a los asesinos materiales de Darío Monges, quien fuera asesor político en la provincia.