El exconcejal de Salvador Mazza había huido del país en el año 2016 y fue detenido en Bolivia en 2019, cuando la policía siguió a familiares que cruzaron al vecino país para festejar el cumpleaños del prófugo.
Tras dos semanas de audiencias en la que declararon más de 25 testigos, ayer a la mañana el fiscal general Carlos Martín Amad solicitó al Tribunal Orán Federal Nº2 de Salta 14 años y 8 meses de prisión para exconcejal de Salvador Mazza por el delito de transporte agravado de estupefacientes, en calidad de coautor. El veredicto se conocerá el próximo 16 de abril.
Imputan a Gerónimo por ser uno de los cerebros de una organización que contrabandeaba cocaína boliviana a gran escala y se lo señala como el responsable de la logística de 267 kilos de cocaína que la Gendarmería secuestró en Santiago del Estero en febrero de 2016. La misma iba escondida en un camión y previamente había sido arrojada desde una avioneta en la zona de Anta.
Gerónimo se hizo famoso ese año cuando en siendo concejal fue citado a la justicia y usó las redes sociales para informar que no se presentaría, para luego huir. Desde entonces siempre aseguró que le habían tendido una trampa y se presentó como víctima de un complot político.
En abril del año 2019 fue finalmente capturado. La aprensión fue producto de una tarea de inteligencia que terminó dando frutos en el día del cumpleaños de Gerónimo, varios familiares decidieron visitarlo en su escondite boliviano. Primero pasó su hija, cerca de las 19.40 del 29 de abril, por el Puente Internacional «Profesor Salvador Mazza». Una hora más tarde, pero por un cruce no habilitado conocido como «Sector 3», ingresaron a Bolivia su madre, su esposa, su suegra, su hijo y su cuñado con claras intenciones de abandonar Argentina sin registrar su salida de manera legal. No sabían que los estaban siguiendo de cerca.
Gerónimo está detenido en el penal federal de General Güemes, en nuestra provincia. Nació en Tartagal en 1973, pero su vida se desarrolló en Salvador Mazza donde desarrolló su carrera política y llegó –a principios de 2016– a la presidencia del Concejo Deliberante. También ocupó el cargo de jefe de Bromatología de la Municipalidad y manejó la veterinaria más importante de la localidad.
