Se trata de Héctor Romero, la última persona que vio a María Cash antes de su desaparición el 8 de julio de aquel año. La declaración de su hermano puso en la mira al transportista.
“Si se mandó una macana, que se haga cargo”, expresó David Romero ante la jueza federal Mariela Giménez, titular del Juzgado Federal 2 de Salta. El hermano del camionero fue citado a declarar en el marco de una serie de testimoniales ordenadas por el fiscal general Eduardo Villalba, para intentar reconstruir qué fue lo que pasó con la joven diseñadora que se encuentra desaparecida desde hace 13 años.
Según se informó tras la reapertura del caso, la citación de David Romero surgió a partir de las contradicciones de su hermano, que dio tres versiones distintas del encuentro que tuvo con María Cash antes de que a la joven se le perdiera el rastro. En una de ellas dijo que la había llevado en su camión.
La frase usada por el testigo no pasó desapercibida en el Juzgado. Para los investigadores, marcaría el fin de un presunto pacto de silencio que existía alrededor de lo ocurrido con la joven.
Héctor Romero declaró que se cruzó con María Cash cuando la joven hacía dedo en la ruta 9/34 y dijo que la llevó desde la rotonda de Torzalito hasta la gruta de la Difunta Correa. Sin embargo, los testimonios del dueño de una gomería cercana al santuario de la Difunta Correa y de su padre pusieron en duda la versión del camionero al asegurar que “carece de fundamentos”.
Ahora, según El Tribuno, el hermano del transportista complicó más su situación al reconocer que Héctor fue la última persona que vio con vida a María Cash y, visiblemente abrumado durante la declaración, sentenció: “Si se mandó una macana, que se haga cargo”.