El “sí” del tartagalense correspondería con una serie de acuerdos que el bloque de Máximo Kirchner cerró con bloques distintos al del Frente de Todos.
El aporte de las grandes fortunas fue anunciado por Máximo Kirchner en abril, presentado recién en agosto y dictaminado un mes después. El poroteo estuvo duro según los medios nacionales y habría resultado clave la firma del diputado de Córdoba Federal, Paulo Cassinerio, que junto a sus tres pares garantiza el quórum junto a la habitual ayuda del bloque de José Luis Ramón.
“Pero se sumarán también los diputados cercanos a Roberto Lavagna y la dupla de socialistas, para asegurar un número mayor a los 129 necesarios para la mayoría simple. Cordobeses, socialistas y lavagnistas integran el interbloque federal, cuyo jefe Eduardo «Bali» Bucca firmó el pedido de sesión. El salteño Andrés Zottos pedirá alguna asignación más para el interior, pero no votará en contra”, destaca el sitio La Política Online.
No se sumarán los diputados del Frente de Izquierda, con un dictamen propio; y Juntos por el Cambio, el único bloque que firmó en contra en comisión. Suficiente para que el kirchnerismo diseñe el relato de grieta con su final feliz y, por primera vez en el año, con tropa propia en las calles, justo en el día de la militancia. Aunque esta tarde buscaban protocolos para respetar el distanciamiento social.
La demora en tratarse en estos casi dos meses, según la versión oficial, se debía a un pedido de Martín Guzmán para aguardar su esperada reforma tributaria, pero el llamado a sesión de Máximo dio cuenta de que si así fue perdió la paciencia.
El proyecto grava por única vez a los patrimonios mayores a 200 millones de pesos, alcanzará a unos 10 mil contribuyentes y permitirá recaudar 307 mil millones de pesos, un 1.1% del PIB. Tendrá alícuotas que partirán del 2% y subirán a 2.25% para quienes sumen 300 millones en su declaración jurada (que serían la mayoría), 2.5% a 400; 2.75% a 600; 3% a 800; 3.25% a un 1500; y 3.5% a 3000 o más.
La recaudación tendrá cinco destinos específicos. Un 20% a la compra y/o elaboración de equipamiento médico, elementos de protección, medicamentos, vacunas y todo otro insumo crítico para la prevención y asistencia sanitaria. Otro 20% para subsidios a las pymes y el mismo porcentaje irá al programa integral de becas Progresar, gestionado en el ámbito del Ministerio de Educación con el objetivo de sostener a los chicos en el sistema escolar.
Un 15% será para los habitantes de los barrios populares identificados en el registro Nacional de Barrios Populares en Proceso de Integración Urbana (RENABAP), con el plan de mejorar la salud y las condiciones habitacionales de sus habitantes. En los cuatro casos, el Gobierno está obligado a coparticipar los fondos con las provincias, otra negociación de estos meses.
No así en el otro 25% que se girará en programas de exploración, desarrollo y producción de gas natural de YPF S.A. «Integración Energética Argentina S.A. deberá reinvertir las utilidades provenientes de los mencionados proyectos, en nuevos proyectos de gas natural durante un plazo no inferior a diez años a contar desde el inicio de vigencia del presente régimen», señala el proyecto.