En 2009 un desborde de un río inundó gran parte de la ciudad y el barro arrastró casas y autos; hubo pérdidas irreparables, además de un escándalo posterior por las donaciones para los damnificados.
Como todos los 9 de febreros posteriores al año 2009, en Tartagal se conmemora una fecha trágica para la ciudad cabecera del departamento San Martín, al norte de Salta. Ese día un alud hizo estragos: cientos de evacuados y casi mil familias perjudicadas por la crecida del río que bajó con lodo para arrasar con parte del poblado.
A las 8 de la mañana ese día lunes el caudal del río llevaba una cantidad inusual de agua y algunos trozos de madera. En las dos horas siguientes, el panorama cambió a un desborde que arrastró el puente Ferroviario, casas, autos, arrojando daños por millones de pesos y como saldo tres personas fallecidas.
A trece años de la tragedia que afectó todos los servicios en Tartagal por varios días, este miércoles por la tarde estaba convocado el acto en memoria a las tres víctimas del alud. Se realizaría en la plazoleta que lleva el nombre Rosa y Modesta Alfaro, dos fallecidas en esta tragedia.
Un balance arrojó pérdidas millonarias por arriba de los 500 millones de pesos, reconstrucción del puente sobre el Rio Tartagal, pérdida del puente ferroviario, reconstrucciones varias en la barriada en Santa María y cuadras aledañas en zona centro.
La noticia se hizo nacional. Llegó ayuda del gobierno a quienes en ese entonces estaban al frente de la provincia y el municipio de Tartagal: Juan Manuel Urtubey y Sergio Leavy, respectivamente. El tema llevó a que en el transcurso de 2009 y reveladas una serie de irregularidades por parte de la gestión del «Oso» Leavy», el Concejo Deliberante votara su destitución aunque continuó en ejercicio de sus funciones e incluso fue reelegido para un segundo mandato.