El senador nacional responsabilizó al ex ministro de Economía del descalabro de Alternativa Federal: “no tiene visión política”, declaró. También dijo que “apoyará a Urtubey”.
Todo empezó ayer con la reunión de Pichetto – en la Casa de Santa Fe – con el gobernador socialista Miguel Lifschitz, el salteño Juan Manuel Urtubey y con Margarita Stolbizer del GEN. También estaba invitado Lavagna que prefirió enviar a su hijo Marco quien repitió la decisión indeclinable de su padre: será precandidato sin ir a una primaria.
«Me cansé de la incomprensión», se quejó el senador nacional al revelar la frustrada cumbre. Y agregó: «En el escenario de la construcción política la manera de contener a los más jóvenes era ir a una primaria, no era una internita de un partido». Habló también de las «aspiraciones legítimas» de Urtubey y de Sergio Massa y sobre el primero reafirmó su voluntad de acompañarlo como precandidato presidencial, mientras mantiene una remota esperanza de retener al ex intendente de Tigre y calificó a María Eugenia Vidal como «una adversaria política, nunca una aliada».
Para la primera vuelta anticipó que Alternativa Federal irá con fórmula propia: «Seguramente se presentará Juan Manuel Urtubey y voy a tener que acompañar. No queremos ir al encuentro del kirchnerismo, cuando uno abandona, abandona». Varias veces descartó que esa fuerza política se sume al esquema de Cambiemos.
La arenga siguió hoy en el tradicional almuerzo del Rotary Club Buenos Aires, donde Pichetto no usó metáforas. “Aunque reiteró que hay tiempo hasta el 12 para las alianzas, repartió críticas y responsabilidades en el peronismo no K. Reivindicó a Urtubey y al cordobés Juan Schiaretti y de Lavagna dijo: «No tiene visión política». «Prácticamente han desintegrado el espacio de Alternativa Federal que hasta había logrado imponer su nombre» describió.
Sobre Massa, aseguró: «Está viendo qué camino tomar, lo cual le agrega incertidumbre a este espacio». Y comparó la construcción de Alternativa Federal con la forma en que el kirchnerismo nominó sus candidatos nacionales y en la provincia de Buenos Aires: «Se contraponía al del kirchnerismo, el dedazo que ni el PRI de Mexico lo utiliza por autoritario».
Sobre la construcción que realizaba con mandatarios provinciales que ahora acompañan la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández, Pichetto afirmó: «Los gobernadores están muy preocupados por su destino» y anticipó que se quedarán «en la posición más cómoda».