Florencia de la V recordó a Lohana Berkins y Diana Sacayán tras la media sanción de Diputados al proyecto de Promoción del Acceso al Empleo Formal para Personas Travestis, Transexuales y Transgénero.
“Muchas compañeras durante todo el día se lamentaban en sus redes de que ellas no estuvieran acá para ver el fruto de su legado y su lucha finalmente cosechado. Yo estoy convencida de que estuvieron ahí, saboreándolo”, resalta una parte del sentido escrito que Florencia de la V publicó en el diario Página 12.
Allí destacó cómo la solemnidad habitual del congreso mutó el pasado jueves cuando “¡Todo era tan trava!” como los eventos propios del colectivo. “Ellas, nuestras traviarcas Lohana y Diana, sin duda, estaban ahí (…) Me resultaba difícil no emocionarme al escuchar las diferentes oratorias y el reconocimiento a estas dos travas sudacas que, a fuerza de convicción, perseverancia y lucha hicieron de sus voces nuestras voces y las escucharon cuando nadie lo hacía. Sé que parte de mi entusiasmo tenía que ver con la reparación histórica que esta ley significa para nuestro colectivo, nada menos que la posibilidad de acceder a un trabajo formal, tener entre manos por primera vez un recibo de sueldo que se traduce como acceso a cosas que estaban vedadas”, escribió la mujer en homenaje a dos referentas indiscutidas del sector que ya no caminan por estas tierras: la salteña Lohana Berkins y la tucumana Diana Socayan.
Para Florencia de la V esa media sanción es una forma de restituir un derecho negado, una compensación con un sector al que la democracia le dio siempre la espalda y una forma de subsanar años de abusos para quienes por ser “travas” pagaron todo más caro. “¿Por qué? Por migrantes del género (…) Por ser travas, pagaríamos un alquiler más caro o viviríamos en la calle. Por travas, nos cobrarían un cuarto de pensión como si fuera una suite del hotel Alvear. Por travas, le íbamos a tener que abonar un canon a la policía para poder caminar de día en el barrio o para que no nos lastimaran. Por travas, todo sería más caro: los maquillajes, las pelucas, los tacos, la ropa, la peluquería, la depilación o las hormonas. Tómalo o déjalo, sin derecho a exigir nada. Esas violaciones a los DDHH quedaron atrás gracias a Lohana Berkins y Diana Sacayán”, enfatiza el artículo.
“La invocación a sus nombres en casi todas las oratorias de la sesión fue el mejor homenaje a estas visionarias que advirtieron derechos donde solo había hostilidad. Cuando obtuvo la media sanción con 207 votos afirmativos, lxs diputadxs se pusieron de pie para aplaudir a las pocas compañeras allí presentes. En cada una de ellas estaban Lohana y Diana”.