Los responsables están acusados de envenenar alimentos para matar animales de forma masiva lo cual habría desembocado en la intoxicación de personas.
Sebastián Saravia Zenteno, dueño de la finca donde aparecieron muertos varios animales, y su empleado, Roberto Flores, fueron acusados por el delito de envenenamiento de sustancias alimenticias.
Es una ampliación hecha por el fiscal penal interino de Cerrillos a cargo de la fiscalía de Rosario de Lerma, Gabriel Portal, quien ya había imputado a los mencionados por maltrato y actos de crueldad contra animales.
Para fundamentar las acusaciones, Portal citó medidas ordenadas, los elementos secuestrados hasta el momento, informes policiales, inspecciones oculares, fotografías de animales muertos, declaraciones testimoniales, el informe de allanamiento y el del CIF, entre otros.
Según informó Fiscales Penales, la acusación encuentra razón en el Art. 200 del Código Penal en tanto “se encuentra plenamente acreditado que los acusados crearon un peligro común, puesto que envenenar trozos de carne (…) la misma causó colateralmente la intoxicación de dos personas, quienes al entrar en contacto con sus animales que fueron envenenados, sufrieron también los efectos de la sustancia venenosa Carbofurán”.
“El veneno empleado por los encausados tiene la potencialidad e idoneidad para poner en peligro la salud de las personas en general, puesto que es un potente biocida”, subrayó Portal sobre la causa iniciada semanas atrás luego de la aparición de varios animales muertos en San Luis.
