El sector salud en Salta y el país se prepara para recibir un duro golpe en sus bolsillos con la aplicación del Impuesto a las Ganancias en los sueldos de julio, a cobrarse en los primeros días de agosto. Según el Dr. Cristian Villagrán, representante del gremio ATE seccional Orán, una franja importante de trabajadores de la salud se verá afectada por esta medida impositiva, que establece un piso de $1.800.000 para solteros sin hijos y $2.200.000 para trabajadores con familia.
La implementación de este impuesto genera incertidumbre entre los trabajadores del sector, ya que aún no hay precisiones sobre su aplicación. Villagrán señaló que ni siquiera con la ayuda de contadores se puede descifrar la reglamentación actual, lo que augura sorpresas en la modalidad de aplicación y los ítems afectados en el recibo de sueldo.
El impacto en el sector salud promete ser significativo, según expuso Villagrán. Haciendo una comparación con situaciones anteriores, el representante gremial recordó que de cuatro guardias completas realizadas, una era destinada al pago del impuesto. Hoy, con el valor de una hora de guardia rondando los $9.000, se estima que una guardia completa podría ir directamente a las arcas del estado, lo que representa un golpe contundente a los ingresos de los trabajadores de la salud.