La incertidumbre económica golpea al sector con proveedores que no venden, medicamentos sin precios y un futuro sombrío.
La situación de las farmacias en Salta es crítica. Con una suba descontrolada de precios en medicamentos, desabastecimiento por parte de los proveedores y un mercado sin horizonte claro, el presente del sector es de máxima incertidumbre y su futuro, bastante sombrío.
Francisco Puló, referente farmacéutico provincial, describió el difícil panorama que enfrentan. La obra social PAMI genera las mayores dificultades, ya que los precios que paga están tan desfasados que las farmacias entregan los remedios «prácticamente gratis» y «se están fundiendo».
Es un escenario que se repite con otras obras sociales: facturan con meses de demora, con precios antiguos que no contemplan las subas descontroladas, por lo que no pueden reponer stock. «La salud está totalmente destruida», lamentó Puló.
Sostener una farmacia se volvió casi imposible: cobran tan poco que no alcanza para reponer productos. Esto genera desabastecimiento o directamente el cierre del local. «Estamos en un momento muy difícil, esto no se vivió nunca», afirmó Puló a InformateSalta.
Ante este sombrío panorama, el referente pidió al Gobierno mayor firmeza para renegociar precios y poder vender de otra forma porque «así no se puede seguir». Además aclaró que, de no mediar cambios, el acceso a medicamentos para los adultos mayores, aunque cuentan con buena cobertura, peligra por el «sacrificio» actual de las farmacias.
