También está imputado el empleado municipal que le pagó 50 mil pesos para que el uniformado haga la vista gorda. Los hechos ocurrieron en el 2023 en Rosario de la Frontera. La cantidad de rieles sustraídos fueron 20.
En base a estas pruebas, la fiscalía justificó las imputaciones contra ambos acusados que se abstuvieron de prestar declaración. Los dos quedaron en libertad, con el compromiso de someterse al proceso penal y la presentación una vez al mes en la dependencia policial más cercana a sus respectivas viviendas.
Por su parte, la jueza federal de Garantías, Mariela Giménez, dio por formalizada la investigación contra el comisario y el empleado municipal. El primero se llama Manuel Subia, está acusado de haber “liberado la zona” en 2023 para que hurten 30 rieles del ferrocarril a cambio de una coima y fue imputado por el delito de cohecho pasivo en concurso ideal con hurto, en calidad de partícipe necesario. El segundo se identifica como Claudio Ramón Villalba, se desempeñaba como empleado de la Municipalidad de Rosario de la Frontera y fue imputado por el mismo delito, como agente activo de la dádiva y como autor del hurto de los rieles.
En la audiencia, la auxiliar fiscal Rocío Mariscal indicó que las sospechas en torno a los dos imputados surgieron de una investigación que llevaba adelante la fiscalía penal provincial de Rosario de la Frontera, en la cual Villalba era investigado por un presunto vínculo con actividades relacionadas al narcotráfico. Por eso su teléfono estaba intervenido. En esas circunstancias los investigadores de la División de Drogas advirtieron una serie de conversaciones entre Villalba y el comisario Subia.
Los diálogos que la fiscalía reprodujo en la audiencia datan del 18 de diciembre del 2023. En los audios se escucha que el empleado municipal le comunica al comisario que estaba por cargar en el paso nivel un total de 30 rieles. “Me los voy a meter dentro del galpón, es por si pasa alguno de los amigos de la policía, voy en una hora y en un ratito los cargo”, le dijo Villalba al policía pidiendo ser avisado si el personal policial patrullara por la zona. Por el “centrito” le iba a pagar 50 mil pesos. “Vos avísame si pasa algo, en una hora ya los meto en el galpón”, dijo Villalba. Y luego añadió: “ya te llevo la platita”, a lo que el comisario contestó: “Dale, meta”.